Formatos grandes perfectamente organizados: maniobrabilidad en el tráfico urbano
Prisas, calles estrechas y falta de plazas de estacionamiento adecuadas: la clase de vehículo más pequeña entre las furgonetas destaca por su tamaño, especialmente en los trayectos para el servicio técnico y de mensajería.
Mientras que los furgones de hasta 3,5 toneladas de peso bruto, muy utilizados, a menudo no encuentran una plaza para estacionar, la Caddy, la Transit Connect o la Combo juegan con ventaja. "En los centros urbanos, contar con una mayor maniobrabilidad, unas dimensiones familiares y una mejor visibilidad facilita la logística", afirma Marc-Alexander Stachel, director general de HEGLA Fahrzeugbau. "Para los que deben atender a muchos clientes en los cascos urbanos o se desplazan para prestar servicios urgentes, una furgoneta de reparto compacta puede ser un complemento interesante".
En situaciones de poco espacio: ajustable en altura y plegable
A menudo están infravaloradas pero, si se equipan como vehículos industriales, las pequeñas furgonetas ofrecen un alto nivel de funcionalidad comparable al de los grandes furgones de reparto. En la versión básica con bastidor exterior, es posible colocar fácilmente la carga a la altura de la carrocería y sin necesidad de subirse en el interior. De este modo, dependiendo del tipo de vehículo, se dispone de una posición de carga para formatos pesados y sobredimensionados de hasta 180 cm de longitud e incluso más. Además, permite aprovechar una altura de carga de hasta 245 cm. Con las barras de sujeción acolchadas se asegura la mercancía de forma adecuada y profesional en unos pocos pasos. En caso necesario, es posible contar con una fijación adicional mediante el raíl de amarre de serie.
Y para una mayor flexibilidad, Marc-Alexander Stachel recomienda montar el bastidor opcional para aparcamientos subterráneos. Esta estructura especialmente desarrollada para el tráfico urbano es regulable en altura y puede adaptarse a la altura del vehículo. Por otra parte, para que la furgoneta quepa por las calles más estrechas y en los huecos más pequeños, el soporte horizontal es plegable, lo que reduce la anchura al mínimo.
Transporte con una protección de la carga en el interior
En caso de que se necesite un espacio de carga adicional o se transporten con regularidad ventanas, espejos y paneles decorativos que requieran una protección especial, se puede instalar un bastidor interior en la parte trasera del vehículo. El montador coloca la carga en el bastidor desde el exterior del vehículo y, a continuación, la empuja hacia dentro con suavidad.
Asimismo, para causar una buena primera imagen al cliente, el experto en fabricación de vehículos recomienda montar un sistema de almacenamiento de herramientas. "Allí pueden guardarse bien ordenados todos los materiales, manteniéndose seguros durante el trayecto. Aunque utilicen el vehículo diferentes trabajadores, podrán acceder a todo rápidamente y en cualquier momento sin tener que andar rebuscando", afirma Stachel.
Fácil de retirar en unos sencillos pasos
Cuando no se necesite el bastidor exterior durante un periodo de tiempo prolongado, puede retirarse en pocos minutos. Esto resulta muy práctico, por ejemplo, para los desplazamientos particulares, el cambio de neumáticos o el lavado a fondo de la carrocería. Además, también puede utilizarse el bastidor desmontable en diferentes furgonetas, lo que permite un uso flexible.
"Para aprovechar al máximo las posibilidades de carga, coordinamos estrechamente nuestras estructuras con los fabricantes de vehículos", explica el director general. "Para asegurarnos de que todo encaje perfectamente con sus necesidades y con la furgoneta, siempre recomendamos una consulta personal antes de adaptar el vehículo con una solución específica para el profesional".
HEGLA Fahrzeugbau es líder en el mercado alemán de estructuras de transporte para cristales, ventanas y elementos de construcción. La reconversión del vehículo tendrá lugar en las sedes de las localidades alemanas de Satteldorf, Beverungen o Kretzschau.